La trágica noticia de la partida de Casey McIntyre, una editora de 38 años de Brooklyn, se dio a conocer dos días después de su fallecimiento debido a un cáncer de ovario. McIntyre, madre y esposa, dejó un mensaje conmovedor programado en Instagram y la red social X, antes Twitter, para informar a sus seres queridos sobre su partida.
“Una nota para mis amigos: si están leyendo esto significa que he fallecido”, comenzó el devastador mensaje que McIntyre había preparado. La editora de Razorbill, una editorial de Penguin Random House especializada en libros para niños y jóvenes, aseguró haber amado profundamente a cada uno de sus seres queridos.
Acompañando sus palabras, compartió fotografías que capturaban momentos felices con su esposo, Andrew Gregory, y su hija de 18 meses, Grace. McIntyre expresó su gratitud por el amor que recibió y reflexionó sobre los últimos cinco meses que pasó en un hospicio en casa, describiéndolos como “mágicos”.
Andrew Gregory, visiblemente afectado por la pérdida de su esposa, compartió una actualización en la página de Instagram de McIntyre. Lamentó que la salud de Casey no le permitiera completar su mensaje, que originalmente incluiría una lista de consuelos y alegrías a lo largo de su vida.